En los años 80, Filiberto Obama Nsué volvió a pintar. Sus cuadros
revolucionarios de la etapa de Macías habían pasado de moda y empezó a
trabajar en "postales" que sirvieran de precario souvenir y que vendía
especialmente a blancos y cooperantes.
Con una técnica
aparentemente simple y económica, en cuatro rasgos, retrataba la
cotidianidad en los poblados fang, los trabajos agrícolas, la caza, las
fiestas, los domingos a la capilla...
Ver otras entradas sobre Fili aquí:
. "La canción de la diarrea"
- "Baleles"
- "Los cuadros revolucionarios"
- "El Nvet y Eyí moan Ndong"
- "Cuadros y cuaderno de Marí Fé y Pepe"
- "Los cuadros de Mar Sanchís"
Me encantan.
ResponderEliminar