Edificio construido en 1900 en un estilo historicista clasicista. Una de sus tiendas, antes oficina del Banco de Vizcaya, conserva aunque parcialmente ocultos, los relieves que Frederic Marès hizo para esa entidad. Sin información sobre autoría
Gracias a Alfons Martín por este magnífico texto en su blog Rondaller
"Los relieves de Frederic Marès en el paseo de Gràcia.
Dicen que Frederic Marès es el escultor con mayor obra pública en Barcelona. Es posible, aunque no tengo intención de contar su producción.
Sin embargo, creo que Marès es más recordado por su faceta de coleccionista que por su prolífica carrera como escultor.
Por ejemplo, en el paseo de Gràcia hay dos edificios muy cercanos con relieves de Marès de temática similar. Ambos fueron la sede de entidades bancarias. En los bajos del 51 había unas oficinas bancarias en un edificio del que las redes parecen evitar hablar de ello.
En este edificio construido a principios del siglo XX, el Banco de Vizcaya abrió nuevas oficinas. Decorando una entrada, encontramos unos bajorrelieves que, según me comenta un lector, datan de los años cincuenta.
Si he entendido bien, en el interior había unos murales realizados por Joan Casadevall que, doy por supuesto que han pasado a mejor vida.
Protagonizados únicamente por hombres, los relieves de Frederic Marès representan diversas actividades y alegorías relacionadas con la siderurgia, el transporte, la construcción y la electricidad, industrias en las que este banco operaba principalmente.
Todo ello presenta ese estilo tan grandilocuente de aquellos tiempos que, curiosamente, recuerda mucho al realismo socialista de los años treinta y cincuenta. Era un estilo que se caracterizaba por glorificar el progreso, elevando al trabajador común como un personaje admirable.
Presta atención a los tres aviones que, más que transporte civil, recuerdan mucho a los carteles propagandísticos de la aviación militar, especialmente durante la Segunda Guerra Mundial. (Actualmente la parte superior de ambos murales no son visibles por el falso techo a la entrada de la tienda)
Fíjate que todos los personajes, además de estar el mar de frescos y sonrientes, presentan unos musculados cuerpos que, incluso ahora, serían objeto de deseo de más de uno -y de una-.
Imagino que Marès se rindió a un arte más comercial para recaudar dinero para la labor que realmente le interesaba, que era la salvaguarda del patrimonio. Necesito creer esto."
Ver: https://www.rondaller.cat/2020/08/15/relleus-de-frederic-mares/
Passeig de Gràcia 51
03/03/2023
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