"Características del asentamiento
Poblado fortificado, que ocupa el espolón de una gran loma y abarca una extensión aproximada de 5 ha. Sus dimensiones muestran su importancia y el control que pudo ejercer sobre otros pequeños poblados de la zona, controlando las vías de comunicación entre la Meseta y el valle del Ebro.
Sistema defensivo
Llama la atención su potente sistema defensivo, que está rodeado por tres recintos murados, entre los que destaca el más interior, construido con sillares ciclópeos, con una torre en su extremo sureste que conserva más de 4m de altura.
Los recintos murados
- El tercer recinto, el más exterior, cierra una superficie de 5 Ha. Los tramos visibles permiten identificar una muralla de cajones, de 1,5-2 m. de anchura, que conserva en algunos lugares hiladas de piedra hasta 1,20 m. de altura.
- El segundo recinto delimita un espacio de aproximadamente 2,5 Ha. Igualmente parece tratarse de una muralla de cajones de entre 1,5 y 2 m de anchura, cuya altura llega a los 2 m en algunos puntos. En el lado Este, junto a la posible entrada principal del oppidum, se conserva una estructura de planta cuadrada adosada a la muralla por la parte externa; únicamente conserva una hilada de grandes piedras bien escuadradas, quizás cimientos, y en el sondeo realizado han aparecido fragmentos de cerámica celtibérica.
- El primer recinto es el más interior y el más alto en el cerro. Cierra un espacio de aproximadamente 1,5 Ha (Fig.4), manteniendo una altura media de unos 2 m y una anchura aproximada también de 2 m.
La muralla del primer recinto
La estructura de esta muralla es compleja, ensanchándose en el ángulo sureste, para albergar una torre. Se trata de una muralla, del tipo de cajones, por presentar divisiones o compartimentos internos del relleno de piedras y tierra por medio de muros o tirantes transversales, para ganar en consistencia.
La muralla muestra un estudiado diseño, ya que se compone de varios elementos: un antemural (1); un relleno de cascote para cimentación (2); el lienzo o paramento exterior (3); el relleno de piedras y tierra (4) en el que se ha encontrado un muro intermedio de sustentación (5) y unos tirantes estructurales (6); el lienzo o paramento interior que completa la muralla (7); y adosado a éste ha aparecido una escalera (8) que permitiría el acceso a la torre y al posible paseo de ronda.
Toda esta serie de recursos constructivos indican la importancia de este asentamiento, ya que junto a los aspectos defensivos necesarios, esta obra introduce un valor añadido con el que trata de resaltar el poder y prestigio de sus ocupantes.
Esta muralla presenta una serie de recursos constructivos que indican la importancia de este asentamiento, ya que junto a los aspectos defensivos necesarios, esta obra introduce un valor añadido con el que trata de resaltar el poder y prestigio de sus ocupantes.
La torre
El ensanche de la muralla en el ángulo sureste cobija una torre semicircular que conserva todavía una altura de 4m y 11 m de anchura, que protegería la puerta de entrada al recinto interior. Auque falta todavía por excavar para tener una información más completa, este tipo de torres no se conocen en esta zona pero si en áreas próximas como el Bajo Aragón, a partir del siglo III a. C.
El espacio interior y cronología
Las catas realizadas en el espacio intramuros han aportado construcciones rectangulares pero sin poder concretar bien el esquema urbanístico, ni definir adecuadamente los espacios domésticos, sin poder precisar como se articularían ni cuantas calles habría. La cronología atribuida a este poblado, que muestra gran entidad, correspondería a un momento avanzado del mundo celtibérico, siglos III-I a. C."
Ver: https://celtiberiahistorica.es/es/exposicion-viva/los-rodiles-cubillejo-de-la-sierra
Vistas aéreas: Google Maps
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