"La Santa Iglesia Catedral Metropolitana de Santa María la Real de la Almudena, conocida simplemente como Catedral de la Almudena, es una catedral de culto católico, dedicada a la Virgen María bajo la advocación de la Almudena, y sede episcopal de Madrid.
Construida muy cerca del emplazamiento de la anterior y muy antigua iglesia de Santa María de la Almudena, que se levantó a su vez sobre una mezquita, la catedral está dedicada a la Virgen de la Almudena, patrona de Madrid. El nombre de esta virgen y catedral derivan de la palabra árabe al-mudayna, que significa "ciudadela". La catedral está ubicada en el centro histórico de la ciudad de Madrid; la fachada principal se encuentra frente al Palacio Real, mientras que la fachada del crucero mira hacia la calle de Bailén y el acceso a la cripta se realiza por la cuesta de la Vega, al final de la calle Mayor. A diferencia de la mayoría de templos cristianos, de orientación este-oeste, la catedral tiene una orientación norte-sur, fruto de su concepción como parte integrante del conjunto del Palacio Real.
La catedral es el principal templo de la Archidiócesis de Madrid, sede del arzobispo y del capítulo metropolitano. Se trata de un edificio de 102 metros de longitud y 73 de altura máxima, construido desde finales del siglo XIX a finales del XX, en diferentes estilos arquitectónicos: neoclásico en el exterior, neogótico en el interior y neorrománico en la cripta.
Fue consagrada el 15 de junio de 1993 por el papa Juan Pablo II,3 en el transcurso de su cuarto viaje a España.
Historia
Según la leyenda, cuando en 1083 el rey Alfonso VI de León conquistó Madrid y expulsó a los musulmanes, se obsesionó con encontrar un valioso icono de la Virgen María que siglos atrás había sido escondido entre los muros de la ciudadela para que estuviera a buen recaudo. Incapaz de localizar la figura perdida, Alfonso VI se entregó a la oración hasta que una sección de los muros se derrumbó y dejó a la vista la imagen, todavía iluminada por las velas con las que había sido sepultada siglos atrás. El lugar del milagroso y legendario suceso está señalado, en el exterior de la catedral, por una hornacina con una estatua de la Virgen.
Los orígenes de la catedral de la Almudena pueden situarse en la pequeña iglesia de Santa María de la Almudena, de origen tardomedieval, que se emplazaba a pocos metros de la actual catedral, que se levanta, según recientes excavaciones, sobre el lugar que ocupó la judería de Madrid.4 Durante siglos hubo intentos de dotar de mayor grandiosidad a la mencionada parroquia, intentos que fueron haciéndose más intensos con la consolidación del imperio y con el establecimiento en la villa de la sede de la Corte. Según un informe de 1567:
No obstante, la villa pertenecía a la archidiócesis de Toledo, antigua capital del reino hispánico visigodo, que siempre se opuso a perder su capitalidad eclesiástica. Así, se intentó ampliar y reformar a la pequeña iglesia de santa María hasta su desaparición en 1868, cuando se derribó para ensanchar la calle Mayor. Finalmente, se impuso la necesidad de construir una iglesia nueva para dar cabida al culto a la patrona de Madrid.
El día 4 de abril de 1883 el rey Alfonso XII puso la primera piedra del nuevo edificio, que sería la futura catedral de Madrid, en unos terrenos que, por mediación de la reina María de las Mercedes de Orleans, muy devota de la Virgen de la Almudena, fueron cedidos por el Patrimonio real en 1879.
El espaldarazo definitivo para la construcción fue la creación de la diócesis de Madrid-Alcalá, mediante una bula dada por León XIII, el 7 de marzo de 1885. Mientras se construía la catedral, la antigua iglesia jesuítica del Colegio Imperial, que en aquel momento tenía la consideración de colegiata, bajo la advocación de san Isidro, pasó a ser el templo catedralicio de la nueva diócesis.
En 1964, Casimiro Morcillo recibió el título de arzobispo, siendo la diócesis de Madrid-Alcalá, elevada a rango de archidiócesis. Esta archidiócesis pasó a llamarse archidiócesis de Madrid en 1991, con la restauración de la diócesis de Alcalá de Henares.
El arquitecto Francisco de Cubas, a cargo del proyecto,5 reformó su proyecto inicial como iglesia parroquial, proponiendo una imponente catedral neogótica que seguía la moda imperante en Europa por influencia de Viollet-le-Duc. Navascués la calificó como «el proyecto neomedieval más importante de la arquitectura española del siglo XIX».5 Los trabajos de construcción comenzaron por la cripta, realizada en estilo neorrománico, con acceso independiente por la Cuesta de la Vega y abierta al culto en 1911, una vez concluida por Enrique María Repullés y Vargas. En esa misma época se levantaron los primeros pilares.
Tras el paréntesis de la Guerra Civil, el alcalde de Madrid de la época, José Moreno Torres, encargó al arquitecto Luis Mosteiro la reanudación de las obras y, una vez más, se suscitaron importantes discrepancias sobre el estilo arquitectónico.
Los trabajos quedaron prácticamente abandonados hasta 1950, año en el que Fernando Chueca Goitia y Carlos Sidro ganan el concurso convocado para la terminación de las obras. El aspecto del templo cambió entonces, puesto que, aunque se mantenía el estilo Gótico del proyecto primitivo para el interior de la catedral, el exterior sería ahora neoclásico, siendo este el aspecto que mantiene actualmente. De esta forma, la catedral se integraría mejor con el entorno del Palacio Real.
Las obras continuaron hasta su paralización en 1965, ante la falta de fondos y de apoyo del Ayuntamiento de Madrid. Transcurrieron casi veinte años hasta que, en 1984, se creó un patronato que consiguió el apoyo de instituciones públicas y privadas para finalizar las obras. La catedral fue consagrada por el papa Juan Pablo II el 15 de junio de 1993, tomando el relevo de la Colegiata de san Isidro, que había sido la catedral provisional de Madrid desde 1885.6
Desde su apertura, la Catedral ha estado muy unida a los actos de carácter religioso de la Familia Real española. El día 8 de noviembre del año 2000, fue enterrada en la capilla funeraria, bajo el altar de la Virgen, la reina María de las Mercedes de Orleans, primera esposa de Alfonso XII, gran impulsora de las obras y cuyos restos mortales habían permanecido en el Monasterio de El Escorial hasta la terminación del templo catedralicio.7
El 22 de mayo de 2004, se celebraron los esponsales del rey Felipe VI (entonces príncipe de Asturias) con Letizia Ortiz.8
En 2005 tuvo lugar una exposición sobre la Inmaculada y España, organizada por la Fundación Las Edades del Hombre.9
El 20 de agosto de 2011, Benedicto XVI se convirtió en el segundo papa en visitar la catedral, donde presidió y celebró una misa con seminaristas, dentro de los actos programados en la XXVI Jornada Mundial de la Juventud.10
La catedral de la Almudena suele ser escenario de algunas ceremonias de Estado. Ha sido marco, entre otros muchos, de los funerales de Estado de los expresidentes Leopoldo Calvo-Sotelo en 2008 y Adolfo Suárez en 2014.1112
La catedral de la Almudena es una de las catedrales españolas más recientemente construidas, junto a la catedral de San Cristóbal de La Laguna de Tenerife y la catedral de María Inmaculada de VitoriaExterior
Quizá el elemento más llamativo al exterior de la catedral sea la cúpula, que es doble; gótica vista desde el interior, pero con reminiscencias barrocas al exterior. Presenta un tambor octogonal en el que se abren cuatro grandes huecos termales y una pequeña linterna como remate. La cubierta es de pizarra oscura. A modo de pináculos, doce estatuas que representan a los apóstoles: san Felipe, san Bartolomé, san Mateo, san Simón, san Judas Tadeo, Santiago el Menor, san Matías, san Bernabé, san Pedro, Santiago el Mayor, San Juan y san Andrés. Son obra del escultor Luis Sanguino.
Fachada principa
La fachada principal, hacia la plaza de la Armería, es la situada a los pies del templo, y mira hacia la cara sur del Palacio Real. Se compone de un gran pórtico de columnata doble, siendo el piso inferior de inspiración toscana y el superior de orden jónico. Este conjunto, de aire neoclásico, fue rematado después de la consagración de la catedral por una hornacina barroca, cobijando una imagen de la Virgen de la Almudena. Se colocaron también cuatro estatuas, obra del escultor Ramón Chaparro, que representan a cuatro santos españoles: san Isidro Labrador, santa María de la Cabeza, santa Teresa de Jesús y san Fernando, realizadas en piedra blanca de Colmenar de Oreja.
En el balcón, una vidriera de diez metros cuadrados que representa a la Virgen de Lis, y cuatro estatuas que representan a los cuatro evangelistas, del escultor José Luis Parés.
Dos grandes escudos, ejecutados también por el escultor Parés, se ubican en la parte inferior de las torres, representando las armas plenas de la Casa Real Española y el escudo del papa que consagró la catedral, Juan Pablo II.
En los extremos de la fachada, en dos hornacinas, dos estatuas de bronce de san Pedro y san Pablo, obra de Juan de Ávalos; rematando las hornacinas, dos relieves, la Entrega de las llaves a san Pedro y la Conversión de san Pablo.
Las puertas son de bronce. La central tiene adornos con el tema trinitario, conmemorando el Jubileo del año 2000; una de las laterales hace referencia a la monarquía de España, con efigies de los reyes de la Reconquista; la otra, está dedicada a Hispanoamérica. Son obra del escultor Sanguino.
De las dos torres de esta fachada, a la de la derecha se la conoce como Mariana o de los Gallegos, ya que las campanas fueron donadas por gallegos y cada una de ellas tiene una advocación mariana castiza: Santa María la Real de la Almudena; Santa María de la Paloma; Santa María de Atocha y Santa María de la Flor de Lis. En la torre de la izquierda, que da a la calle Bailén, está el carillón, fabricado en Saldaña (Palencia), al igual que las campanas Benedicta, Ancilla Domini, Magnificat y Gratia Plena"
Ver: https://es.wikipedia.org/wiki/Catedral_de_la_Almudena
Calle de Bailén, 10,
Y el pequeño vistazo a,l interior (02/05/2022)
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