"Quiénes somos
Somos una entidad fundada en 1872, con personalidad jurídica oficialmente reconocida, que constituye una tribuna y lugar de reunión de los profesionales de la salud de Cataluña, Baleares, Valencia y Andorra. Somos una institución independiente al servicio del país y no vinculada a ningún organismo oficial.
El objeto primordial de la Academia es fomentar la formación continuada con el estudio y el cultivo de las ciencias de la salud en todos sus aspectos: humano, técnico, social y cívico, tanto en su vertiente asistencial como docente y de investigación.
Somos una comunidad científica viva, fruto del esfuerzo colectivo, que se adapta a las necesidades y circunstancias científicas y sociales del momento, que trabaja en colaboración con otras sociedades médicas, biológicas y farmacéuticas, nacionales y extranjeras, con constante inquietud de progreso.
Somos la mayor corporación médica de nuestro país, por el número de socios, de sociedades y de asociaciones que la integran y por el volumen de actividades científicas que anualmente desarrolla.
Estamos presentes en toda Cataluña, y también en Baleares, Valencia y Andorra, mediante las Filiales de la Academia.
Por todas estas especiales características, fruto del impulso de la sociedad civil, puede considerarse que somos una institución única en el mundo.
Síntesis de la historia de la Academia
Nuestra corporación nació de la fusión de dos entidades fundadas independientemente de cinco años de diferencia. La primera fue El Laboratorio, fundado el 15 de enero de 1872 – con sede en el número 12 de la Riera Baixa de Barcelona – por cinco estudiantes de Medicina, dos de los cuales, Salvador Cardenal y Josep A. Barraquer, debían convertirse en dos de las figuras más ilustres de la medicina catalana. Estos estudiantes se sentían decepcionados por las características de la enseñanza recibida, rutinaria y excesivamente teórica, en unos momentos que estaba naciendo la Medicina Científica.
Querían reparar "la vacuidad y falta de nociones a las que conduce la enseñanza oral de las ciencias médicas"; querían ejercitarse en las prácticas de la materia médica. Dos hechos remarcables ocurren en el nacimiento de El Laboratorio que parecen señalar premonitoriamente su trascendencia. Uno de ellos es que este gesto creador y revolucionario fuese iniciado por unos estudiantes de los primeros cursos de Medicina, cuya propuesta, ante la enseñanza oficial, huyó de la estridencia verbal y se convirtió en un acto constructivo. El otro hecho extraordinario es que, a este grupo de estudiantes tempranos, se sumaran al cabo de poco tres personalidades, las más representativas de la Medicina Catalana en ese momento: Giné y Partagàs, Catedrático de Disección; Josep de Letamendi, Catedrático de Anatomía, y Bartomeu Robert, Catedrático de Patología, el médico más brillante de la Barcelona de ese tiempo.
El segundo germen de la actual Academia fue la Academia de Ciencias Médicas, fundada el 25 de marzo de 1877 en una dependencia de la Escuela de Náutica de la Diputación de Barcelona, y que contaba con nombres ilustres como: Jaume Pi y Sunyer, Lluís de Góngora, Bonet y Amigó.
El 5 de abril de 1878 se fusionaron las dos sociedades y la entidad naciente tomó el nombre de Academia y Laboratorio de Ciencias Médicas de Cataluña. La sede fue establecida en el número 10 de la calle Paradís de Barcelona y en 1892 se trasladó a la calle Portaferrisa, al número 6. A partir de esta unión, en el seno de la Academia se fueron creando las diferentes Sociedades Científicas, según la estructuración en especialidades de los estudios y la práctica de la medicina del siglo 8, hasta llegar a la práctica de la medicina del siglo pasado.
La Academia no vivía aparte, se adecuaba a su entorno. Así, cuando con el traspaso del siglo se produce en el resto del Estado español la reacción pesimista, revisionista, dicha del 98, en Cataluña los intelectuales se sintieron espoleados de una manera marcadamente emprendedora, tomando conciencia de su personalidad catalana. En 1901 la Academia aprobó el catalán en todas las comunicaciones y tomó el nombre de "Academia y Laboratorio de Ciencias Médicas de Cataluña".
En todas partes se extendió un movimiento de revalorización colectiva que se manifestó en todos los aspectos culturales y políticos; los profesionales de la medicina no quedaron al margen, la vida científica tomó un sello autóctono y progresista. El impacto de la Medicina experimental de Claude Bernard estimuló los trabajos de investigación y los estudios médicos fueron adquiriendo un rigor científico moderno. La Academia se hizo eco de esta inquietud de los médicos por seguir de cerca el progreso médico y Claude Bernard felicitó a nuestros académicos por este motivo.
Con el tiempo, iba creciendo la biblioteca, mejoró el utillaje del laboratorio, se efectuaron trabajos, tuvieron lugar numerosas sesiones científicas y clínicas, y se organizaron congresos. Más adelante, cuando los centros ciudadanos dispusieron de buenos laboratorios, la Academia cerró el suyo y aumentó la biblioteca, que llegó a ser la mejor dotada del país en documentación sobre las ciencias de la salud. En 1923 la Academia se trasladó a la calle Roger de Llúria, número 7 y en 1932 se trasladó de nuevo, ahora al Casal del Médico, situado en la Via Laietana, 31.
Otro efecto de la evolución de la institución fue la creación a partir del año 1950 de las Filiales de la Academia. Con el objetivo de acercar la formación y fomentar el intercambio de experiencias y conocimientos, a los profesionales de toda Cataluña y Baleares, se crearon grupos de trabajo en diferentes comarcas y ciudades con la misma función que realizaba la Academia en Barcelona. Esta iniciativa se amplió hasta las 20 Filiales actuales en Cataluña, Baleares, Valencia y Andorra.
El nombre de la Academia, siguiendo los avatares de la vida política de nuestro país, debe cambiar su nombre. En 1939 se convirtió en: Academia de Ciencias Médicas. En 1967 pasa a denominarse Academia de Ciencias Médicas de Cataluña y Baleares y en 1969 vuelve a ser: la Academia de Ciencias Médicas de Cataluña y de Baleares.
La Academia se traslada otra vez de sede en 1970, compartiéndola, esta vez, con el Colegio Oficial de Médicos de Barcelona, en el paseo de la Bonanova, 47, y en 1996 amplía sus locales en el mismo paseo de la Bonanova, 51.
Esta última ampliación representó una mejora transitoria, tanto en lo que se refiere al aumento de aulas para las sesiones científicas, reuniones de juntas directivas, comisiones, etc., como en cuanto a la disponibilidad de espacio para la infraestructura administrativa. Todos recordaremos que se llevó a cabo después de la aquiescencia de la Junta Consultiva y la aprobación de la Asamblea General Extraordinaria. Gran parte de las sociedades hicieron aportaciones sustanciosas y, junto con una derrama extraordinaria, fue posible paliar totalmente los gastos que ocasionó esta ampliación.
Con las nuevas técnicas informáticas, archivo de datos, información de investigación y difusión de conocimientos, se instaura una red telemática al alcance de todos los interesados en las ciencias de la salud. Actualmente la WEB de la Academia puede considerarse un portal, donde están incorporadas, en gran parte, las páginas de las Sociedades Científicas y Filiales de la entidad, con aportación de contenidos científicos y formativos para sus socios.
La Academia sigue creciendo, e inicia el estudio de cambio en una nueva sede que pueda dar cabida a todas las actividades que sus actuales 76 Sociedades Científicas y más de 21.000 socios le piden. La Junta de Gobierno estudia diferentes posibilidades para una nueva ubicación, en la que poder compaginar en un solo edificio más salas de sesiones y un mayor espacio para las diferentes secciones de la secretaría.
El 20 de diciembre del año 2000, la Asamblea General Extraordinaria de la Academia aprueba el proyecto de construcción de una nueva sede en la calle Major de Can Caralleu, números 1-7 de Barcelona, un edificio con 3.500 m2 que se inauguró el curso 2004-2005. Proyecto realizado por TdB Architects (estudio profesional abierto por Juan Trias de Bes) En sus 7 salas de sesiones, 4 salas de reuniones y el Auditorio, se pueden realizar todo tipo de actividades desde talleres, hasta sesiones científicas, congresos, reuniones y seminarios.
Fiel a su trayectoria, ya su implicación con la sociedad civil y la comunidad científica de nuestro país, en 2004 la Academia reforma su nombre para dar cabida todas las profesiones que participan en las actividades de las Ciencias de la Salud, y así el 29 de junio de 2004, en una nueva Asamblea General: se aprueba por unanimidad de los aisitentes el nombre de:
Acadèmia de Ciències Mèdiques i de la Salut de Catalunya i de Balears, “L’Acadèmia”
A lo largo de estos más de 150 años de historia, la Academia ha llevado a cabo su labor con la firme voluntad de hacer que la formación continuada llegue a todos los profesionales de las Ciencias de la Salud, que forman parte de un colectivo de personas que, como aquellos primeros estudiantes, quieren mejorar sus conocimientos, siguiendo la filosofía humanista. Paralelamente, la institución se ha ido adaptando a los tiempos para cumplir sus objetivos fundacionales.
Éste fue uno de los motivos por los cuales, la Academia creó en el año 2012 la Fundación Instituto Interuniversitario InterAc Salud, que tiene como objetivo principal ser un referente de primera línea en la formación especializada de posgrado, la investigación en formación y el estudio en el ámbito de las Ciencias de la Salud, integrando el conocimiento académico y universitario con el que proviene de la práctica.
Igualmente la Academia, fruto de su adaptación constante a los cambios del entorno y, con el fin de mejorar la oferta de formación continuada de calidad por sus 30.000 socios, ha puesto a disposición de las Sociedades Científicas y las Filiales la infraestructura necesaria para llevar a cabo las actividades formativas en formato virtual y streaming: Sessions, Cursos, Congresos y otros"
Ver: https://institucional.academia.cat/qui-som
Carrer Major de Can Caralleu, 1-7
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Vistas aéreas: Google Maps
Gracias por su aportación a: Rosendo Muñiz Soler
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