El año 1821 se produjo en Barcelona una trágica epidemia de fiebre amarilla que causó una enorme mortandad. En memoria de los servidores públicos que perdieron la vida asistiendo a los enfermos se erigió este cenotafio *, situado en el cruce de las calles centrales del Cementerio.
"Tiene un basamento en forma de templete cuadrado, con columnas en los ángulos, y en cada cara, bajo sendas coronas de bronce, hay lápidas de mármol con inscripciones alusivas a aquellos que dejaron la vida en acto de servicio ciudadano. Del centro del basamento emerge un escalonado que hace de soporte de una columna coronada por una cruz.
La primera versión de este monumento debió ser erigida por el mismo Antoni Ginesi cuando se construyó el cementerio, y reformada en 1865. Entre 1895 y 1896 se sustituyó por la obra actual -que parece querer seguir el modelo anterior- proyectada por el arquitecto municipal, Leandre Albareda Petit.
* Un cenotafio (del griego "Keno", que significa "vacío" y "tipo" que significa tumba), es un monumento funerario de carácter simbólico, donde no hay nadie enterrado, erigido en honor de personas a las que se quiere rendir un homenaje póstumo. "
Ver: https://www.poblesdecatalunya.cat/element.php?e=12243
Ver también el excenete artículo de Xavi Casinos
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